Sunday, August 26, 2007

Como un cuadro de Escher

Guanajuato es la ciudad más chueca del mundo
y sin embargo
todas su partes embonan perfectamente donde deberían.

2 comments:

Blas Barajas, escritor said...

así es, por ejemplo aquella bonita cantina donde nos vimos y aquel bar donde gritamos las canciones de sabina. Saludoxxx

Cicuta drinker said...

Sí, escher me gusta, más de lo que debería. Las cantinas.. más que un vórtice, son una punto aúreo donde todos nos juntamos.