Si yo fuera...

Besarte es uno de mis pasatiempos favoritos. Lo ha sido por unos años ya, desde la primera espantosa vez, de la que no recuerdo gran cosa más allá de la idea de que habíamos demorado bastante. No recuerdo si lo dijiste o te lo dije o se quedó en el aire... no podría asegurar tampoco si hubieras estado de acuerdo.

Es complicado decir que besarte es uno de mis pasatiempos favoritos, cabe aclarar que no lo práctico tan seguido como los otros y que de ser así es muy probable que no lo apreciara del mismo modo. ¿Sabes? siempre nos decimos esto el uno al otro, ¿o soy sólo yo repitiéndolo en voz baja como un mantra?, no, tengo la impresión de que en efecto, esta es una de las cosas que nos decimos... como un consuelo más que como un pretexto.

Tengo claro que nunca ninguno dirá nada más de lo que ha sido estipulado, y en cambio no tengo claro si de hecho existe algo más que decir, es decir, por tu parte. Yo por supuesto que tengo muchas cosas que agregar, pero no seré yo quien te sugiera que vayamos por un café este viernes o que veamos juntos una película...

Me quedo con la conexión eterea e intangible pero eterna
¿Me quedo con la conexión eterea e intangible pero eterna?

Besarte, era, en efecto, uno de mis pasatiempos favoritos, lo fue por algunos años... Sucede que al fin y al cabo, no soy más que una adolescente de esas que le hacen poemas a la luna, y tu eres uno de esos idiotas que desarrollan panegíricos filosóficos y los publican en internet...

Nos ha llegado el tiempo de crecer